Efecto 2006

Bombardeada y arribada por el sin fin de trabajo de propaganda y publicidad en torno al fenómeno modal “Navidad y Año Nuevo” por todos los medios posibles: radio, televisión, periódicos, revistas, folletos, trípticos, y por supuesto Internet…he sido pisoteada, so bajada, trastocada, manoseada, cegada e incluso violada. El efecto de dichas campañas ha sido el peor de los actos ocultos y casi inhóspitos del llamado Ser Humano… Pensar. Sí, Pensar rememorando y recordando los hechos y sucesos que han dilatado mi estancia sobre la tierra… por los menos éste 2006.

Pensar y repensar mi estado físico, mental, sexual, accidental, instrumental, menstrual, emocional, ilusional…y el con fin de estados por los que he atravesado en el año dos mil seis, me ha conducido obligatoriamente y luego entonces inevitablemente a repasar lo significativo y también desmitificativo que resultaron los trescientos sesenta y cinco días.

Sin lugar a dudas un año difícil, nada estructural, amorfo y con poco sentido de coherencia, se plantó y comenzó a dar raíces:

El transcurso de mis cercanamente últimos largos y exhaustos días en la universidad, en el proceso académico de realizar una tesis profesional, leyendo y releyendo una vez más los textos que podrían acercarme al tema central del proyecto: ¿Marx?, ¿Engels?, ¿Europa del Este? ¿Yugoeslavia? y respondiendo ignorantemente las interrogantes… dio fin el 2006.

Comprando y quemando los lanzamientos musicales más significativos, el caso de Primal Scream “Riot City Blues”, David Gilmour y su “On An Island”, Richard Ashcroft entregándome “Keys to the world”; no comprando, si reescuchando y desempolvando con ferviente deseo y necesidad de explotar en mis fieles oídos, frías y también cálidas obras como Patti Smith “Horses”, Nick Cave and The Bad Seeds “B Sides & Rarities”, Richard Hawley “Coles Corner” (tan ya escrito y descrito). No comprando, no quemando, tampoco reescuchando ni desempolvando sino deseando el arte de Ella Fitzgerald, Dizzy Gillespie y las re ediciones de The Jesus and Mary Chain y más, principal y recurrentemente al momento en mi mente, fueron un motor importante sino es que determinante en…el 2006.

Mis grandes Viajes, como no pensar en ellos si fueron tan prologados, sublimes, escalofriantes, conscientes, vulnerables y por de más quebrantables y no perpetuos; la Inhalación, Exhalación, Respiración, Imaginación y Percepción como acciones constantes en las grandes travesías...del 2006. Un motor más de permanencia, conciencia y también sobrevivencia en medio de los grandes y sangrantes grumos tejidos a mí alrededor.

Experimentaciones sexualmente dulces, heterosexuales, homosexuales, bisexuales y asexuales, una característica pasional de mis últimos años, el lado probablemente más animal, sustancial, esencial y tiernamente brutal de mi ser. Contraponiéndose con la amarga experiencia de fallecimiento, deceso, desvanecimiento de cercanos seres amados… en éste maldito 2006.

Aún veo correr la sangre en mis venas, aún mis ojos lloran, constantemente mi líquido pasional es vaciado, mis dedos logran deslizarse, mis músculos permanecen firmes, mis corneas aún están dañadas, mis senos aún son sensibles, mi cuerpo aún está cansado, mi mente aún vuela, mi corazón aún bombea, mis amigos aún son una especie en extinción, mi cerebro continúa siendo vulnerable, respiro, aún disfruto la neblina de un buen cigarro, mi paladar sigue preguntando por el barato y no mal vino tinto y Whiskey, aún la pluma se desliza a través de mis palabras pobre y torpemente, aún deseo desaparecer… Creo que aún pienso… a finales del 2006.