For my Chrisad

Por una u otra razón que desconozco, me vuelvo a encontrar pensando en el poder, satisfacción, atracción, placer, miedo, tranquilidad, excitación y confianza, que puede llegar a producir un sonido emitido desde lo más profundo de un ser, desde la boca del estomago, recorriendo los intestinos, atravesando la garganta para hacer erupción en los labios y derramarse en el oído: la voz. Fría, dulce, aguda, ronca, seria, todas y cada una habían acariciado mi oído, pero hasta hace unas ochenta o cien horas nunca había sentido una así…triste, jamás había escuchado alguna en condición de derrumbarse, en estado de desmayo, a punto de resquebrajarse, y sin embargo, seguir luchando…